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Con la llegada de las lluvias del otoño y el incipiente frío invernal, los problemas de humedades en las casas se acrecientan. Estos fenómenos climatológicos, característicos de ambas estaciones, aumentan la posibilidad de que las humedades aparezcan en nuestras viviendas por humedades ascendentes, infiltraciones o por la condensación del agua que se producen en el interior.

La humedad causa sensación de frío, malos olores, propicia la aparición de mohos, ácaros, manchas en las tapicerías, paredes, techos, y puede acarrear problemas de salud a las personas. Si no se remedia debidamente, éstas van a más y pueden afectar a la propia estructura de la construcción.

Prevención y solución

"Las patologías de humedad pueden tener orígenes diversos, por ello es de importancia capital diagnosticar certeramente dichas patologías para aplicar la solución definitiva. Manchas de humedad, filtraciones, desconchamientos de pintura, salitres, agua en los cristales, malos olores, humedad en armarios, sótanos, etc. son síntomas inequívocos de que existen problemas graves de humedad que afectan, principalmente, nuestra salud y desvalorizan nuestro patrimonio", afirma Miguel Ángel López, responsable del Departamento Técnico de Murprotec.

"Un diagnóstico profesional del origen de la humedad y un tratamiento a medida es la mejor solución posible", asegura Miguel Ángel.