El
Edificio Hydros de 112 viviendas promovido por empresa zaragozana
Ebrosa y obra del arquitecto
Basilio Tobías Pintre ha recibido el
Premio Ricardo Magdalena de Arquitectura 2009 . El complejo residencial está situado en la Avenida Ranillas de Zaragoza, en la margen izquierda del Ebro y muy próximo a los recintos que albergarán el parque empresarial Expo.
El jurado de esta trigésima edición ha concedido el galardón por unanimidad -y entre los 36 edificios concurrentes-, y ex aequo con el proyecto Parque Fluvial en Tenerías, valorando la contribución de ambos a dignificar el paso del río Ebro por Zaragoza.
Un nuevo proyecto de Ebrosa para la ciudad de Zaragoza Para
Ebrosa la obtención del Premio supone
"un orgullo y una reafirmación del papel que la compañía desempeña en el panorama inmobiliario aragonés" .
El Edificio Hydros es el resultado del concurso público destinado al uso residencial parra la Expo 2008. El proyecto se terminó de construir a tiempo (en abril de 2008) y, actualmente, tras los trabajos de acondicionamiento necesarios, las 112 viviendas del Edificio están puestas a la venta y en plena fase de comercialización.
De las unidades construidas, 68 disponen de tres dormitorios y ocupan casi la totalidad de las seis primeras plantas, mientras que las 44 restantes cuentan con dos habitaciones. Orientadas al sur, las viviendas se vuelcan al río y disfrutan, desde sus alargadas terrazas, de vistas privilegiadas del casco histórico de Zaragoza. Disponen de zonas comunes, piscina y pistas de pádel.
La obtención de este galardón, se suma a otros reconocimientos: el García Mercadal del año 2000, por dos bloques de 144 viviendas, situados en la Avda. Gómez Laguna, 44-45; el Accesit Ricardo Magdalena del año 1990 por el Edificio Génesis; o el Premio del Salón Inmobiliario de Aragón 2007, en reconocimiento a su larga trayectoria.
Una obra singular de Basilio Tobías El Jurado ha resuelto otorgar el Premio al Edificio Hydros por
"la solvencia de su encuentro con la ciudad, con el río y con el uso residencial" . El complejo, obra del arquitecto Basilio Tobías, es un edificio en el que los amplios espacios abiertos miran al Ebro, mientras que las dos alas que componen el conjunto se integran en el Río y hacia el sugerente perfil de la ciudad histórica.
Respecto a la fachada, el autor ha empleado paneles cerámicos de gran formato y paneles móviles correderos, que dotan al Edificio de un juego de luces y sombras cambiante a lo largo del día. Es de destacar el novedoso sistema estructural del edificio que, como ha destacado el arquitecto
"permite que los 12 metros de fondo, de norte a sur, no tengan pilares, lo cual otorga una gran flexibilidad" .