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De nuevo tenemos que lamentar un trágico accidente, en esta ocasión ocurrido el pasado 24 de mayo, en un edificio de viviendas de la localidad vizcaína de Sestao, en el que al parecer un cortocircuito eléctrico ha sido, según los Bomberos, la causa más plausible del incendio que acabó con la vida de un padre y su hijo, por inhalación de humo, mientras la madre y esposa de las víctimas se recupera en un hospital de las quemaduras y contusiones.

Ante esta dramática situación, la Plataforma para la Revisión de las Instalaciones Eléctricas (PRIE), entidad sin ánimo de lucro formada en 2003 por las principales instituciones del Sector de Material Eléctrico (ADIME, AFME, ANFALUM, CEDIC, FACEL, FENIE y FERCA), reclama por enésima vez a toda la clase política la aprobación de una norma de obligado cumplimiento que garantice el mantenimiento periódico de las instalaciones eléctricas domésticas, como ya sucede con el gas. De esta forma, se podrá prevenir la alta siniestralidad actual, que según un último informe, es de 1 accidente mortal cada 4 días.

En este sentido, en 2009, la Plataforma PRIE ha contabilizado un total de 183 muertos por accidentes eléctricos domésticos. Una cifra ciertamente preocupante, que se repite año tras año, y ante la cual las autoridades no parecen hacer nada. Además, a la cifra de fallecimientos hay que añadirle cerca de 7.000 incendios anuales por causas eléctricas, y casi 5.000 accidentes por descargas eléctricas. Estas cifras convierten las sobreexposiciones eléctricas en la 7ª causa de hospitalización en España, especialmente entre menores de 4 años y mayores de 65.