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La empresa Extremeña de Arroces ha adquirido recientemente una manipuladora telescópica New Holland LMI 133 a Talleres Extremadura, concesionario de New Holland Construction para Extremadura desde 1986, con sede en la localidad de Don Benito. La arrocera, situada en Miajadas (Cáceres) es una moderna industria que produce y elabora más de 50.000 toneladas de arroz anuales. Este nuevo cliente del concesionario extremeño acudió al mismo en busca de una máquina que fuera capaz de cargar material a una altura mínima de 4 m y con una pala de 4 m³ de capacidad. El material a cargar es la cascarilla, un subproducto generado en el proceso de fabricación del arroz, que aunque tiene poco peso ocupa mucho volumen.

Talleres Extremadura de Don Benito tiene una amplia experiencia y numerosos clientes dentro del sector de las arroceras, almacenes y secaderos de grano. Para Javier Hidalgo, su Director Comercial, las principales ventajas de la maquinaria de New Holland en este sector son "su gran maniobralidad, su agilidad y la rapidez de movimientos en el terreno en el que tiene que trabajar". La calidad del acabado, el diseño del habitáculo y la facilidad a la hora de realizar trabajos de mantenimiento son las obras características que destaca como muy valoradas por este tipo de empresas.

Cuando Extremeña de Arroces pidió una oferta, Talleres Extremadura le ofreció la manipuladora telescópica turbo de New Holland del modelo LMI 133, de 10,6 m de altura máxima de elevación y una capacidad de elevación de 3.300 kg. Como explica Javier Hidalgo "es una máquina que cumple a la perfección con las necesidades del cliente y su versatilidad le permite muchas más posibilidades además del trabajo que tiene que desempeñar actualmente".

Según Alonso Ruiz Sánchez-Barroso, gerente de Extremeña de Arroces, "después de ver varias máquinas y valorar precio, prestaciones y servicios nos decantamos por la telescópica de New Holland Construction y por Talleres Extremadura". Para él también fueron decisivos factores como "la cercanía del taller, la rapidez del servicio técnico y la celeridad en la entrega de la máquina, ya que la necesitábamos con cierta urgencia". Javier Hidalgo reconoce este último punto y añade: "a la entrega, el cliente también manifestó su satisfacción por el diseño y por la calidad del acabado, con aire acondicionado de serie, joystick monomando en el manipulador de trabajo, cabina de visión panorámica...".

Aunque ya conocían la marca, esta es la primera New Holland de la arrocera. En palabras de Alonso Ruiz Sánchez-Barroso: "La máquina está muy bien, no obstante, solicitamos una modificación para adaptarla mejor al uso que le íbamos a dar, pues al trabajar en una zona con mucho polvo de arroz hay que limpiar el radiador muy a menudo". Por ello, el cliente quería un ventilador reversible que pudiese invertir el sentido del aire de la refrigeración de manera controlada. Según aclara Hidalgo "además de refrigerar el radiador, invirtiendo el sentido de las aspas el ventilador del motor consigue auto limpiarlo cuando sea necesario. Esta es una opción de las telescópicas de New Holland Construction, con ella se han cumplido por completo las expectativas del cliente".

Telescópica LMI 133 de New Holland: máxima movilidad

Caracterizadas por una visibilidad perfecta en todas direcciones y una estabilidad y maniobrabilidad extraordinarias, las manipuladoras telescópicas turbo de New Holland componen una gama de 10 modelos que van desde los 7,13 a los 17 m de altura de elevación. La LMI 133 es la segunda más pequeña de todas ellas, con un peso en orden de trabajo de 8.700 kg, tiene una altura máxima de elevación de 10,60 m y de 6,80 m con la carga máxima de 3.300 kg. Es una máquina sumamente versátil y útil en múltiples trabajos, garantizando siempre el máximo rendimiento y seguridad. Está equipada con motor CNH 4TC Tier 3 A de última generación, con una cilindrada de 4,5 l y transmisión tipo Power Shift de 4+3 velocidades, una transmisión rápida, positiva y suave que ofrece una fuerza de tracción superior al tiempo que proporciona la máxima comodidad al operador.

Asimismo lleva un sistema hidráulico "Load Sensing-Flow Sharing", que garantiza movimientos simultáneos, independientes, suaves y precisos en todas las aplicaciones. Esta telescópica se distingue por su fácil manejo y una capacidad de giro de 3,40 m. Tiene 3 posibilidades de dirección a seleccionar a conveniencia y cómodamente mediante interruptor: a las ruedas delanteras, a todas las ruedas y tipo cangrejo. La cabina, por su parte, es amplia y cómoda. Con una superficie acristalada de 8,1 m², dispone de la mejor visibilidad del mercado, lo que dota al operario de control total del brazo en todas las posiciones.

Es completamente ergonómica, con los mandos e instrumentos situados en la mejor posición para garantizar la comodidad y la seguridad, como el manipulador multifunción con una sola palanca o joystick que, al igual que el aire acondicionado, forman parte del completo equipamiento de serie de la LMI 133.