El Congreso de los Diputados, con los votos en contra del Grupo Parlamentario Socialista y del PNV, ha rechazado incluir en la Ley de Economía Sostenible (LES), la enmienda que CiU presentó el pasado 21 de septiembre de 2010, referente a la necesidad de impulsar la renovación de las instalaciones eléctricas en el ámbito doméstico.
El objetivo de esta enmienda era contribuir a una renovación pausada pero constante del envejecido parque de instalaciones eléctricas domésticas. En concreto, el texto de la enmienda de CiU proponía que
"las administraciones públicas, en el marco de las respectivas competencias, fomentarán la renovación de las instalaciones eléctricas en el ámbito doméstico, mediante las disposiciones legales pertinentes de obligado cumplimiento, como instrumento de ahorro y eficiencia energética" .
El texto de la enmienda proponía, además, que el Gobierno estableciera una disposición legal para garantizar la adecuación de viviendas e inmuebles, con más de 15 años de antigüedad, a la normativa vigente en materia de instalaciones eléctricas, con ocasión de su transmisión o arrendamiento.
Asimismo, el artículo recomendaba al Gobierno disponer de un fondo económico y financiero, gestionado por las Comunidades Autónomas, para sufragar la inspección de dichas instalaciones a cargo de entidades cualificadas, cuando se efectúe la transmisión de inmuebles o arrendamiento de los mismos y, en su caso, la realización de modificaciones necesarias para adecuar dichas instalaciones a la normativa vigente.
Tras el rechazo de la Cámara Baja, la
Plataforma PRIE trabaja ya en la búsqueda de nuevas disposiciones legales, nacionales y europeas, en las que poder incluir alguna referencia a la necesidad de una revisión periódica de las instalaciones eléctricas domésticas, sustentada en base a tres argumentos: prevención de la alta siniestralidad; contribución al ahorro y la eficiencia energética de las viviendas y edificios; y fórmula de generación de empleo y riqueza.
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