Iskra Zascite , compañía a la vanguardia en la investigación y producción de protectores contra sobretensión y distribuida en España por
Dismatel , anuncia la ampliación de su serie
SAFETEC PV de dispositivos de protección ante sobretensiones (DSP) en sistemas fotovoltaicos.
Los nuevos modelos, que cumplen las normativas IEC-61643-1, UTE C 61-740-51, FprEN 50539-11 y UL 1449 de tercera edición, protegen ante sobretensiones, subidas breves de tensión y transitorios en la red del sistema y evitan "fallos catastróficos" en caso de sobrecarga.
Todos los módulos
SAFETEC PV poseen una tecnología patentada de control térmico (TC) que, eliminando la necesidad delhabitual fusible externo en otros protectores, alarga la vida útil del dispositivo (al impedir la corriente causante de la degradación del varistor), proporciona desconexión de red segura (para evitar la posibilidad de incendio) e impiden la generación de arcos voltaicos.
Estos dispositivos modulares de Clase I y II / Tipo 1 y 2 / B y C se caracterizan por soportar corrientes de descarga máximas Imax de hasta 40 kA por polo, protección de modo PE, elementos MOV y GDT, rango de temperatura operativa de -40 a +80°C, grado de protección IP20 y contacto de teleseñalización (versiones CR).
Los protectores SAFETEC C(R) 40 PV se pueden emplear en cajas strim de fotovoltaica o en cualquier tipo de cuadro eléctrico, dotando de la mayor seguridad posible contra los efectos del rayo y las sobretensiones.
Existen diferentes posibilidades según características:
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SAFETEC PV: los módulos
SAFETEC PV han sido desarrollados para proteger ante impactos directos o indirectos de rayos y ubicarse entre los paneles fotovoltaicos y el inversor CD-AC.
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SAFETEC B(R) PV: la serie
SAFETEC B PV ofrece una protección Clase I+II, con Iimp de hasta 12,5 kA(10/350µs) mediante dos varistores con dispositivos de desconexión térmica y un circuito patentado de control de la corriente. Un indicador monitoriza todas las desconexiones y ofrece un flag de estado en cualquier fase con posibilidad de fallo. Su sistema interno evita las corrientes de fugas e impide al 100% la posibilidad de generación de arcos fotovoltaicos internos que pudieran derivar en incendios en la instalación cosa que, por desgracia, empieza a ocurrir cada vez con más frecuencia.
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