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Atersa ha instalado un sistema fotovoltaico aislado en Fô-Bouré, al norte de Benín, una zona rural donde las familias viven en una economía de subsistencia sin ingresos regulares.

Una vez más, Atersa fue elegida por la Fundación Energía Sin Fronteras que en nombre de la Asociación Mensajeros de la Paz de Benín llevan a cabo un proyecto de electrificación rural. Antes de este proyecto se utilizaban grupos electrógenos para el suministro de energía, con el sobrecoste que implica el combustible, la dificultad de abastecimiento y los perjuicios que causa a la salud y medioambiente.

Mensajeros de la Paz ha creado, en la zona, talleres para trabajar la madera y el metal y también una cooperativa de mujeres para el tratamiento del karité. Con este proyecto se pretende seguir potenciando el uso productivo y empresarial de estos grupos, beneficiando a la población en su conjunto gracias a la disminución de su vulnerabilidad económica, mediante el uso de energía solar fotovoltaica para la alimentación eléctrica de la maquinaria, lo que contribuirá a la sostenibilidad de la actividad, tanto social como económica y medioambientalmente. Además, se suministrará energía eléctrica a las viviendas y comercios locales con la consecuente mejora de las condiciones de vida y al desarrollo de la población de Fô-Bouré.

En 2010 Atersa instaló 120 farolas con luminaria de tecnología LED (ATERSA LED2) con una potencia unitaria de 30 W. El proyecto se desarrolló en toda la parroquia gestionada por los Mensajeros de la Paz. La parroquia cubre unos 2.000 km² y se iluminaron 15 pueblos.

En 2006, Atersa participó en la electrificación con energía solar fotovoltaica de los distintos edificios que conforman un centro médico, nutricional y de acogida, así como la instalación de varios puntos de alumbrado público en Fô-Bouré.