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La idea de realizar reformas en casa puede generar preocupación y dudas. Sin embargo, al abordar una adaptación para personas mayores, estas inquietudes pueden ser aún más importantes ya que, además de la comodidad, entra en juego la seguridad. Desde Dinttel, marca de Dosplanos especializada en reformas de alta calidad para particulares y locales comerciales, nos explican cuáles son los 5 puntos clave para que estas modificaciones sean un éxito y mejoren la calidad de vida y la protección de los mayores.

"En Dinttel comprendemos que la reforma de una vivienda es esencial para asegurar la seguridad, comodidad y bienestar de los mayores en su hogar. Ofrecemos soluciones integrales adaptadas a las necesidades específicas de cada persona, consiguiendo un entorno que promueva la autonomía y calidad de vida", afirma Almudena Marañón, gerente de Dinttel.

Cinco reformas sencillas para facilitar la vida de los mayores en el hogar

1. Ampliar los vanos: Para garantizar la seguridad y la comodidad de las personas mayores, especialmente si usan bastón o sillas de ruedas, es fundamental. ampliar el paso de las puertas o colocar puertas correderas para favorecer la movilidad, así como eliminar desniveles, o colocar barandillas que ayuden al apoyo o sillas salvaescaleras si es necesario.

2. Más luz: La iluminación es un elemento de seguridad y bienestar. Desde Dinttel aconsejamos la instalación de iluminaciones cálidas que imitan la luz natural y permiten mantener un ciclo circadiano adecuado para poder beneficiarse de aspectos como la mejora del estado de ánimo y la reducción del estrés. También es conveniente incorporar puntos de luz en zonas de paso, y el uso de sensores de luz de encendido automático para minimizar el riesgo de caídas.

3. Tecnología de ayuda: Los avances tecnológicos pueden ayudar enormemente a mejorar la accesibilidad de los hogares de personas mayores y dependientes, por ejemplo mediante la automatización de los sistemas de climatización y calefacción para que se enciendan o apaguen automáticamente en función de la temperatura de cada habitación. La tecnología también se puede usar para programar el encendido y apagado de luces, instalar persianas eléctricas que eviten el esfuerzo físico de subirlas o bajarlas manualmente y, muy importante, para incorporar dispositivos de alerta y comunicación, como botones de emergencia o sistemas de videovigilancia.

4. Colores y bienestar: Seleccionar la paleta cromática adecuada para una vivienda va más allá del puro aspecto estético, ya que puede influir significativamente en el estado de ánimo de sus residentes. En el caso de los mayores, recomendamos optar por tonalidades relajantes, como los azules y verdes pastel, para crear un ambiente tranquilo y apacible, y evitar colores demasiado estimulantes, como el rojo y el amarillo puro, aunque en ciertos contextos puedan ser útiles para activar la energía. También se debe limitar el uso de los tonos blanco y negro, que pueden generar sensaciones deprimentes.

5. Accesorios de última generación: Existen en el mercado materiales y elementos especialmente adecuados para esta etapa, como los suelos antideslizantes para ayudar a reducir el riesgo de caídas, especialmente en estancias como el suelo del baño o la cocina. En el baño, específicamente, aconsejamos colocar un plato de ducha amplio con accesorios como barras de apoyo, banco, grifería accesible, tipo monomando o automática (con sistema de detección de presencia). Por su parte, en la cocina, sería recomendable la instalación de detectores de humo y gas, y placas de inducción con sensor de apagado automático, que la encimera sea baja para poder utilizarla sentados, montar y evitar los muebles altos que puedan propiciar una caída.