Novedad

El campo de la construcción, en todas sus variantes, sigue en constante evolución hacia materiales y métodos cuyos beneficios se adaptan, con el tiempo, a las necesidades que va generando la sociedad. Y de ello se sirve la ingeniería para llevar a cabo sus cada vez más sofisticados e innovadores proyectos.

Este progreso es especialmente palpable en las obras de ingeniería técnica:

- Salas de comunicaciones (IT).
- Centrales nucleares y de generación de energías
- Salas eléctricas y subestaciones.
- Laboratorios.
- Salas blancas
- Torres de control o salas de operaciones.
- Salas de emergencia.

Todas ellas tienen algo en común: los pavimentos utilizados en las mismas resultan de una importancia crucial debido a las necesidades del trabajo que se lleva a cabo en su interior. En estos casos, la introducción de suelos técnicos elevados no solo aporta soluciones a las nuevas necesidades constructivas, sino también funcionalidad y diseño.

Estos suelos nacen de la necesidad de poder albergar todas las instalaciones en un mismo lugar y hacerlas más accesibles (cables, tuberías de agua, electricidad y climatización, elementos de fibra óptica y similares). Desde hace más de 40 años en POLYGROUP han entendido estas necesidades y siguen avanzando en el desarrollo de estos suelos en proyectos técnicos de gran complejidad, en los que las características del lugar exigen una serie de requisitos que garanticen la seguridad.

Es por ello, que el pavimento de una sala técnica en cualquiera de las instalaciones mencionadas se decide en función de tres características principales: la capacidad de carga, el flujo del aire-refrigeración y el control electrostático.

En concreto, los sistemas de suelo técnico conductivo GAMAFLOR de POLYGROUP contribuyen a limpiar las cargas electrostáticas generadas en este tipo de edificaciones, haciendo derivaciones a tierra desde el propio suelo técnico elevado en los puntos que resultan más favorables para ello desde la instalación. Al mismo tiempo, permiten la colocación de tuberías, sistemas de voz y datos e instalaciones eléctricas en el plenum, de un modo fácil y limpio.

A esta ventaja hay que añadir otras características que convierten a los suelos técnicos elevados POLYGROUP en los más idóneos en los proyectos técnicos de ingeniería: alturas regulables, resistencias al fuego, a cargas pesadas y a la electricidad.

Todo ello hace que sean los elegidos en estas áreas de trabajo (que plantean requisitos muy exigentes en cuanto al equipamiento), ya que por sus propias características generan cargas electrostáticas y controlarlas es una de las funciones que desempeñan, por ejemplo, los suelos técnicos elevados POLYGROUP con revestimiento ligero antiestático de PVC CONDUCTILE SUPER-OR.

En concreto, el suelo técnico elevado consiste en un sistema de paneles modulares que se apoya sobre una estructura sólida de elevación, lo que permite crear un espacio (plenum) que facilita la canalización de cualquier tipo de instalación mecánica, eléctrica y de climatización. A todo esto, hay que sumar la ventaja de que ofrece un acceso rápido a los servicios para llevar a cabo las acciones de reparación, mantenimiento y actualización, interfiriendo lo menos posible en las labores de los usuarios del área.

La ingeniería tiene en cuenta todas estas ventajas y se sirve de ellas a la hora de llevar a cabo las construcciones de edificios técnicos, lo cual redunda en beneficio no solo de la propia edificación, sino también en los propios trabajadores, que cuentan con lugares de trabajo más seguros, cómodos y eficientes.